Anoche fui al circo...

Anoche fui al circo, no recuerdo la última vez que fui, sólo se que fue hace mucho mucho tiempo atrás. Dejé de ir porque me daban pena los osos y los elefantes, sin contar los leones y monos.
Pero el circo de anoche fue diferente, fue de acróbatas y los tigres blancos que estaban ahí no tenían mirada triste y el perrito que actúo con el payaso se robaba todos los aplausos y bien que los disfrutaba.
Por poco más de dos horas, me olvidé del mundo y volví a ser niña chica, reí a carcajadas, aguante la respiración con los acróbatas, pagué tres veces lo que vale una coca cola light de 600 ml... ¡y comí algodón de azúcar de color rosa!...
Anoche fui al circo, y me olvidé del mundo... a veces es necesario simplemente dejarte ir, volver a reir, olvidarse de los problemas, porque como dicen los chinos que son muy sabios... "Si tiene solución, ¿para qué preocuparse? y si no tiene solución... ¿para qué preocuparse?". ¡Sabios eh! ¿no te parece?.

P.D.: Si el circo pasa x tu casa... no dejes de ir!.